La miopía, también conocida como visión corta, es un trastorno ocular en el cual las personas pueden ver objetos cercanos con claridad, pero experimentan dificultad para enfocar objetos lejanos. Aunque generalmente es vista como un problema de visión, la miopía no es del todo negativa.
¿Qué es la miopía?
La miopía es un defecto refractivo común que afecta a millones de personas en todo el mundo. Se produce cuando el globo ocular es más largo de lo normal o cuando la córnea tiene demasiada curvatura.
Como resultado, los rayos de luz que entran en el ojo se enfocan delante de la retina en lugar de directamente sobre ella, lo que provoca una visión borrosa de los objetos distantes.
El grado de miopía puede variar de leve a severo, y su progresión generalmente ocurre durante la infancia o adolescencia, estabilizándose en la adultez. Sin embargo, en algunos casos puede continuar empeorando con el tiempo, especialmente si hay factores genéticos involucrados.
Los síntomas de la miopía suelen ser fáciles de identificar. Las personas que la padecen suelen experimentar:
- Dificultad para ver objetos lejanos, como señales de tráfico, la pizarra en la escuela o la televisión desde una distancia considerable.
- Visión borrosa a distancia, especialmente en actividades al aire libre o al intentar reconocer rostros a larga distancia.
- Esfuerzo visual y fatiga ocular, ya que el cerebro y los ojos intentan compensar la falta de claridad.
- Dolores de cabeza frecuentes causados por el esfuerzo continuo de los ojos para enfocar.
La miopía suele diagnosticarse mediante un examen ocular de rutina, donde un optometrista o un oftalmólogo mide la capacidad visual y evalúa si se necesitan gafas o lentes de contacto.
La corrección de la miopía es sencilla y puede realizarse mediante varios métodos. Entre los tratamientos más comunes se encuentran:
- Gafas: Son el método más tradicional y fácil de corregir la miopía. Las lentes correctivas permiten enfocar la luz correctamente en la retina.
- Lentes de contacto: Ofrecen una mayor flexibilidad y libertad de movimiento que las gafas, y pueden ser una excelente opción para quienes practican deportes o actividades físicas.
- Cirugía refractiva (Cirugía LASIK o PRK): Es una opción popular para las personas que desean una solución a largo plazo. Este tipo de cirugía modifica la forma de la córnea para corregir la refracción de la luz.
- Lentes intraoculares: En casos severos, se pueden implantar lentes artificiales en el ojo para corregir la miopía.
Aquellas personas que saben que tienen miopía desde temprana edad, suelen ser más conscientes de la importancia de cuidar su salud visual. Esto puede llevar a la adopción de hábitos beneficiosos como evitar la exposición prolongada a pantallas sin descanso, mantener una buena iluminación al leer o trabajar, y asistir a revisiones oftalmológicas regulares
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- Lentes de contacto.
- Armazones.
- Lentes de sol.
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Si tiene cualquiera de estos síntomas, es probable que necesite lentes especiales. No obstante, pueden ser también síntomas de otros problemas, por lo que para realizar una correcta evaluación de su salud ocular, le recomendamos que se realice una evaluación oftalmológica.
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